Conociendo a Alice IV: Lo que hacen las parejas {B. Colaboradores}
¡Buenos días!
Al fin semana santa y al fin acabo con esta historia. Me ha dado pena porque he podido desarrollar más la personalidad de Alice y Karina y Ryan a pesar de ser una historia de 4 capítulos nada más. Creo que he conseguido lo que buscaba aunque no soy yo la que juzga eso. Espero que os paseis por el blog de Laura para ver la reseña que le da a esta historia, que esperemos que sea buena ;)
También espero que el resto de los participantes hayáis disfrutado de esta colaboración entre lectores y escritores, y ya nos pondremos Sara y yo de acuerdo para ver cuando repetimos la experiencia :) Esperemos que sea pronto.
Como no me queda mucho más que decir, aqui teneis el capitulo anterior y aquí está toda la lista. Espero que os haya gustado tanto como a mi.
Y ahora sí, el último capítulo.
La puerta se abrió igual que la vez anterior, casi entreabierta pero invitándote a pasar. Con algo de nerviosismo, Karina entró en la habitación, cerrando tras de sí con cuidado.
Alice seguía tumbada en la cama, y aunque había corrido a limpiarse las lágrimas del rostro, en sus ojos seguía reflejándose aquel brillo rojizo de quien acaba de llorar. Componiendo una sonrisa de ánimo, Karina se sentó a su lado en la cama, tendiéndole el helado de chocolate y una de las cucharillas.
- Tu tío está bastante preocupado por ti.- Admitió ella. Tampoco quería admitir que ella estaba preocupada, porque casi no conocía a Alice, pero sin duda sabía cómo se sentía.- Y no sabe qué hacer para que te sientas mejor.
- ¿Y tu sí?- Alice arqueó una ceja, arañando con su cucharilla la superficie del helado y llevándoselo a la boca. Karina sonrió.
- Te he traído el helado.
- Cierto.- No dijeron nada durante un rato, aunque Alice sentía una cierta presión en el pecho deseando salir, y poder soltarse. Y en el fondo, Karina tampoco le sacaba tanta edad. Podía hablar con ella con naturalidad- Una de mis amigas se ha pasado todo el curso jugando conmigo. Fingía hacer de confidente de lo mío con un chico, pero en realidad solo estaba viendo donde fallaba para no repetir mis errores. Hoy iba a comer con ellas y la he visto besándose con él.
Karina hizo una mueca, no tenía nada de buena pinta.
- ¿Y qué hiciste?- Preguntó, intentando no meter demasiado el dedo en la llaga.
- Fingir que me encontraba mal, despedirme con una sonrisa y comerme el orgullo mientras ella me daba dos besos. Ojalá pudiera vengarme.
- En estos casos, el mejor desprecio es el mejor aprecio- Comentó Karina, cogiendo otra cucharada de helado- Pero lo mejor que puedes hacer es un enfrentamiento por parte del chico. Si la atacas a ella, él la defenderá. Si vas a él, no te creerá. Si le demuestras poco a poco como es ella y le vas abriendo los ojos, todavía podrás ganártelo.
- ¡Pero ya no le quiero! Me ha traicionado.- Susurró Alice, dejando la cucharilla posada en su paladar.
- Ah, eso es otro problema… Si quieres movilizo a la mafia rusa para asustarles- Bromeó Karina, riéndose al ver la expresión ilusionada de la joven- ¡es broma!
- Jo…
- Pero puedo enseñarte a insultar en ruso. Intimidas más.- Propuso Karina, haciendo reír a Alice.- Eso sí, tienes que hablar con tu tío.
Alice asintió, bajando la cabeza. Los cortos mechones rubios le cubrieron la cara.
- Soy muy dura con él, ¿verdad?- Preguntó en un susurro.
- Estás en la época.- Intentó tranquilizarla Karina, pasándole el pelo tras la oreja para que no le tapara el rostro.- Y él es un poco torpe con las mujeres.
- La verdad es que sí, bastante. ¿Cómo le aguantas?
Karina rió, acariciándole la espalda. Ahora Alice parecía de mejor humor.
- Son cosas de mayores- Dijo, y al instante se rió al ver la mueca de asco que ponía Alice. Logró serenarse poco después, poniéndose en pie y cerrando la tarrina- Venga, vamos fuera, tu tío está deseando ver esa sonrisa tuya.
Alice asintió, poniéndose en pie y caminando hacia el comedor. Cuando llegaron la mesa ya estaba puesta y Ryan estaba trayendo una pizza recién horneada. Miró fugazmente a Karina y luego a Alice, que corrió hacia él y lo abrazó. Ryan tuvo que hacer malabares para no tirar la pizza, y acabó con los brazos en alto mientras era rodeado por su sobrina. Con cuidado, Karina se acercó y le cogió el plato, permitiendo que el hombre correspondiera al abrazo de su sobrina.
- Lo siento, tío…- Susurró Alice, todavía pegada al pecho del adulto.- Sabes que te quiero, ¿verdad?
Ryan tuvo que contenerse para no llorar, sus ojos tenían una pequeña película cristalina sobre ellos.
- Y yo a ti, Alice, y yo a ti.- Murmuró, besando su coronilla.
Comieron con tranquilidad, haciendo bromas y explicándole a Alice los estudios de Karina. Luego pasaron a hablar de las clases de Alice y de algún modo, Karina y Alice acabaron hablando de sus actores favoritos. Ryan, algo incómodo, comenzó a recoger, lo que hizo que ambas se rieran y fueran a ayudarle. Mientras Karina recogía el mantel en el salón, Alice y Ryan ponían el lavavajillas.
- Me gusta Karina- Susurró Alice, sorprendiendo a Ryan- Es muy maja.
- Oh. A mi también me gusta mucho.
- Deberías decírselo.
- Ya lo sabe.
Alice arqueó una ceja.
- Creo que no me estás entendiendo…- Le sacó la lengua, volviendo hacia el salón. Sin embargo, justo antes de salir, se detuvo, dio media vuelta y dio un beso en la mejilla a Ryan. El hombre sonrió, algo sorprendido por el gesto, observando como ella se iba y entraba Karina con los manteles en la mano, doblados.
- Me he dado cuenta de que no sé donde guardas las cosas- Susurró, algo avergonzada. Ryan rió.
- Trae, lo llevo yo- Se detuvo al coger los manteles para darle un beso en los labios a Karina.- Muchas gracias por lo que hiciste con Alice.
Ella le restó importancia sacudiendo la mano.
- Es lo que hacen las parejas, ¿no?
Y entonces Ryan comprendió a qué se refería Alice. No eran nada más allá de besos y cenas y citas. Y Karina era maravillosa en muchos más aspectos de los que él podía haber pensado. Ensanchó la sonrisa, consciente de lo que su sobrina había visto y él aún no era capaz de decir, y volvió a besar a Karina, consciente de que acababa de recibir el beneplácito de su sobrina para algo que esperaba que pronto fuera una realidad.
- Sí. Es lo que hacen las parejas.
Al fin semana santa y al fin acabo con esta historia. Me ha dado pena porque he podido desarrollar más la personalidad de Alice y Karina y Ryan a pesar de ser una historia de 4 capítulos nada más. Creo que he conseguido lo que buscaba aunque no soy yo la que juzga eso. Espero que os paseis por el blog de Laura para ver la reseña que le da a esta historia, que esperemos que sea buena ;)
También espero que el resto de los participantes hayáis disfrutado de esta colaboración entre lectores y escritores, y ya nos pondremos Sara y yo de acuerdo para ver cuando repetimos la experiencia :) Esperemos que sea pronto.
Como no me queda mucho más que decir, aqui teneis el capitulo anterior y aquí está toda la lista. Espero que os haya gustado tanto como a mi.
Y ahora sí, el último capítulo.
La puerta se abrió igual que la vez anterior, casi entreabierta pero invitándote a pasar. Con algo de nerviosismo, Karina entró en la habitación, cerrando tras de sí con cuidado.
Alice seguía tumbada en la cama, y aunque había corrido a limpiarse las lágrimas del rostro, en sus ojos seguía reflejándose aquel brillo rojizo de quien acaba de llorar. Componiendo una sonrisa de ánimo, Karina se sentó a su lado en la cama, tendiéndole el helado de chocolate y una de las cucharillas.
- Tu tío está bastante preocupado por ti.- Admitió ella. Tampoco quería admitir que ella estaba preocupada, porque casi no conocía a Alice, pero sin duda sabía cómo se sentía.- Y no sabe qué hacer para que te sientas mejor.
- ¿Y tu sí?- Alice arqueó una ceja, arañando con su cucharilla la superficie del helado y llevándoselo a la boca. Karina sonrió.
- Te he traído el helado.
- Cierto.- No dijeron nada durante un rato, aunque Alice sentía una cierta presión en el pecho deseando salir, y poder soltarse. Y en el fondo, Karina tampoco le sacaba tanta edad. Podía hablar con ella con naturalidad- Una de mis amigas se ha pasado todo el curso jugando conmigo. Fingía hacer de confidente de lo mío con un chico, pero en realidad solo estaba viendo donde fallaba para no repetir mis errores. Hoy iba a comer con ellas y la he visto besándose con él.
Karina hizo una mueca, no tenía nada de buena pinta.
- ¿Y qué hiciste?- Preguntó, intentando no meter demasiado el dedo en la llaga.
- Fingir que me encontraba mal, despedirme con una sonrisa y comerme el orgullo mientras ella me daba dos besos. Ojalá pudiera vengarme.
- En estos casos, el mejor desprecio es el mejor aprecio- Comentó Karina, cogiendo otra cucharada de helado- Pero lo mejor que puedes hacer es un enfrentamiento por parte del chico. Si la atacas a ella, él la defenderá. Si vas a él, no te creerá. Si le demuestras poco a poco como es ella y le vas abriendo los ojos, todavía podrás ganártelo.
- ¡Pero ya no le quiero! Me ha traicionado.- Susurró Alice, dejando la cucharilla posada en su paladar.
- Ah, eso es otro problema… Si quieres movilizo a la mafia rusa para asustarles- Bromeó Karina, riéndose al ver la expresión ilusionada de la joven- ¡es broma!
- Jo…
- Pero puedo enseñarte a insultar en ruso. Intimidas más.- Propuso Karina, haciendo reír a Alice.- Eso sí, tienes que hablar con tu tío.
Alice asintió, bajando la cabeza. Los cortos mechones rubios le cubrieron la cara.
- Soy muy dura con él, ¿verdad?- Preguntó en un susurro.
- Estás en la época.- Intentó tranquilizarla Karina, pasándole el pelo tras la oreja para que no le tapara el rostro.- Y él es un poco torpe con las mujeres.
- La verdad es que sí, bastante. ¿Cómo le aguantas?
Karina rió, acariciándole la espalda. Ahora Alice parecía de mejor humor.
- Son cosas de mayores- Dijo, y al instante se rió al ver la mueca de asco que ponía Alice. Logró serenarse poco después, poniéndose en pie y cerrando la tarrina- Venga, vamos fuera, tu tío está deseando ver esa sonrisa tuya.
Alice asintió, poniéndose en pie y caminando hacia el comedor. Cuando llegaron la mesa ya estaba puesta y Ryan estaba trayendo una pizza recién horneada. Miró fugazmente a Karina y luego a Alice, que corrió hacia él y lo abrazó. Ryan tuvo que hacer malabares para no tirar la pizza, y acabó con los brazos en alto mientras era rodeado por su sobrina. Con cuidado, Karina se acercó y le cogió el plato, permitiendo que el hombre correspondiera al abrazo de su sobrina.
- Lo siento, tío…- Susurró Alice, todavía pegada al pecho del adulto.- Sabes que te quiero, ¿verdad?
Ryan tuvo que contenerse para no llorar, sus ojos tenían una pequeña película cristalina sobre ellos.
- Y yo a ti, Alice, y yo a ti.- Murmuró, besando su coronilla.
Comieron con tranquilidad, haciendo bromas y explicándole a Alice los estudios de Karina. Luego pasaron a hablar de las clases de Alice y de algún modo, Karina y Alice acabaron hablando de sus actores favoritos. Ryan, algo incómodo, comenzó a recoger, lo que hizo que ambas se rieran y fueran a ayudarle. Mientras Karina recogía el mantel en el salón, Alice y Ryan ponían el lavavajillas.
- Me gusta Karina- Susurró Alice, sorprendiendo a Ryan- Es muy maja.
- Oh. A mi también me gusta mucho.
- Deberías decírselo.
- Ya lo sabe.
Alice arqueó una ceja.
- Creo que no me estás entendiendo…- Le sacó la lengua, volviendo hacia el salón. Sin embargo, justo antes de salir, se detuvo, dio media vuelta y dio un beso en la mejilla a Ryan. El hombre sonrió, algo sorprendido por el gesto, observando como ella se iba y entraba Karina con los manteles en la mano, doblados.
- Me he dado cuenta de que no sé donde guardas las cosas- Susurró, algo avergonzada. Ryan rió.
- Trae, lo llevo yo- Se detuvo al coger los manteles para darle un beso en los labios a Karina.- Muchas gracias por lo que hiciste con Alice.
Ella le restó importancia sacudiendo la mano.
- Es lo que hacen las parejas, ¿no?
Y entonces Ryan comprendió a qué se refería Alice. No eran nada más allá de besos y cenas y citas. Y Karina era maravillosa en muchos más aspectos de los que él podía haber pensado. Ensanchó la sonrisa, consciente de lo que su sobrina había visto y él aún no era capaz de decir, y volvió a besar a Karina, consciente de que acababa de recibir el beneplácito de su sobrina para algo que esperaba que pronto fuera una realidad.
- Sí. Es lo que hacen las parejas.
Hola preciosa!
ResponderEliminarMe ha gustado mucho, de verdad, me ha dejado con ganas de más!!! Ahora mismo me pasaré por el blog de esta chica para ver la reseña que ha hecho, aunque seguro que es buena!
Quería comentarte también que te he nominado a los premios Liebster Awards, aquí te dejo el link http://routeeighteen.blogspot.com.es/2015/03/premios-liebster-awards.html espero que te guste!
Un besitooo!
Jaja dale tiempo que la pobre tendrá que leerme ;) Muchas gracias por la nominación preciosa.
Eliminar¡Un besín!
Un muy buen final a una muy buena historia... A mi también han estado a punto de escaparseme unas lagrimillas en un par de ocasiones.
ResponderEliminarEspero que volvamos a jugar pronto :-)
Besicos!
Ayy me alegra que te gustara tanto la historia como la iniciativa!! Espero que pronto volvamos a jugar porque seguro que lo pasamos genial! Yo la verdad es que espero que no me coincida con las clases, solo pido eso jajaja
Eliminar¡Un besín!
Bonito final <3
ResponderEliminarEl martes subo la reseña :)
Fue genial la iniciativa.
Ay Laura me alegra que te guste! espero la reseña con ilusión y un poco de nervios.
Eliminar¡Un besín!
Ooooooooh!!! Qué bonito final!!! Sí que es un poco torpe con las mujeres, sí... jajaja
ResponderEliminarVaya caca que se haya acabado tan rápido :(
Me ha encantado la historia ^^ El final abierto me ha gustado... ejem ejem... jajaja podrías seguir con la historia de estas veces que reinventas personajes ;P
Muchas gracias por tu aportación cielo!!! Parece que la iniciativa va viento en popa :D Y me encanta!!!
Un besazo cielooooo!!!
Jajaja tranqui, que la historia es más larga y aunque no solo la protagonicen ellos, está pensada para que vuelvan a aparecer.
EliminarMe alegra que te gustara tanto como para darme a entender que quieres más ;) Quien sabe, rescataré personajes.
Un besazo enorme!!
¡Hola! Estas nominada a un premio en nuestro blog!!!!! Pásate
ResponderEliminarhttp://librossinpaginas.blogspot.com.es/2015/03/premio-liebster-awards.html
Lo bueno y breve dos veces bueno, y Alice aunque no haya estado mucho tiempo por aqui, sus historia ha merecido totalmente la pena ;D
ResponderEliminarUn final bastante redondo, pero he de admitir que ha lo largo de la historia me has emocionado (mala... XD)
Un besote
Lena
Una duda... ¿Váis a hacer un post recopilando todas las historias y sus respectivas reseñas?
ResponderEliminarHolaaaaa!! Vaya, cuando Alice a ido a abrazar a Ryan me he emocionado. Pobre Alice, eso de las amigas traidoras y los casi novios era una mierda. Menos mal que para mí eso ya quedó atrás hace muchos años jajajja. Bueno ni que tuviera ochenta xDD
ResponderEliminarUn besito guapa, me ha gustado mucho la historia en serio *-*