Difíciles Decisiones {Relato Corto/ Cuéntame tu historia}
¡Hola!
Llevo desde el miércoles pensando qué subir hoy, y al final lo he escrito aprisa y corriendo para ponerme al día con la iniciativa cuéntame tu historia. Ya es la cuarta que se crea y seguro que para la semana que viene tengo otra, que esta semana suben nuevo personaje.
Hoy nos traían a una chica sin nombre a la que yo cambié varias veces de nombre jajaja Es una joven algo deprimida con pintas de vagabunda y... bueno, esta es su historia.
¡Espero que os guste!
Ah, el domingo me tiño con henna, si queréis fotos podréis verlas en twitter seguro, pero si queréis las subo al blog también.
Shirley discutía con el jefe de policía. Seguramente se repetían que era la quinta vez que venía en lo que iba de semana, y era martes. La verdad es que había sido una semana muy mala para mi. Soy una chiquilla pequeña, de las que no miras dos veces, con harapos en vez de ropa. Si quiero, no hago ruido. Pero claro…Físico: estatura pequeña, ropa vieja, desgastada y rota (sudaderas grises, vaqueros negros, camisetas monocolor)Personalidad: sumisa, callada, silenciosa, deprimidaEdad: 15 años
La puerta se abrió, entrando tanto el jefe como Shirley.
- ¡Esa chiquilla tiene que acabar de delinquir! ¡Puede ser una menor, pero está constantemente malgastando el tiempo de mis agentes!
Shirley no se inmutaba por los gritos, aunque eran tan estridentes que me retumbaban los tímpanos y tenía que hacer esfuerzos para entender sus palabras. Los gritos siempre me habían molestado, desde que era pequeña, y los ojos se me empañaron, sintiéndome culpable.
Sin embargo, Shirley me sonrió. Fue una sonrisa efímera, de apenas medio segundo, antes de que volviera a mirar a su interlocutor, con la cara roja de rabia.
- Pero si no ha hecho nada- Me señaló con la palma abierta- Obsérvela. Si quisiera robar, ya llevaría mejor ropa. Habéis comprobado que no tiene ninguna joya. Lo único que quiere es un lugar donde estar a solas, agente. Ya le he dicho que no quiere robar, sólo busca un sitio donde sentirse cómoda.
Aquello pareció compadecer un poco al agente. Al menos lo suficiente para que cerrara la boca y me observara con ojo crítico. Al final, siempre era lo mismo. Me echaban la bronca, me decían que no hiciera algo, y yo no lo hacía. Solo buscaba algo un poco distinto para hacer sin sentirme culpable. Llevaba así años, desde que el orfanato se me venía encima, desde que poco a poco todos mis amigos se fueron.
Desde que era la última.
Bueno, no la última última, pero sí la mayor. Nadie me recogería nunca.
Tras otros gritos a un nivel más bajo, añadía el jardín de los Lovejoy como otro de mis sitios vetados y salía junto a Shirley. Mi sudadera gris se removió al andar. Allí dentro, con todos los gritos, nadie se había percatado, sobre todo porque procuraba volverla más amplia mientras estaba sentada. Pero afuera, en la tranquilidad de la calle, se escuchó un maullido
Shirley rió.
- No puedo creerme que todo sea por los gatos, Kayle. ¿Qué piensas hacer con todos ellos?
Me encogí de hombros. Sólo quería salvarlos. Siempre había distinguido sus maullidos, y aquellos estaban perdidos, como yo. Llevaba observándolos días, motivo por el cual me habían pillado varias veces. Su madre no aparecía y los gatitos estaban solos y hambrientos. No podía permitir que se quedaran allí, por lo que me colé en la propiedad, recogí a los pequeños y ahora descansaban en el doble bolsillo de mi sudadera, comenzando a removerse y soltar chillidos agudos.
- Salvarlos, como siempre- Respondí. Shirley sacudió la cabeza y sus rizos rubios ondearon a su alrededor, como unos muelles. Me rodeó con su brazo libre mientras volvíamos hacia el orfanato.
- Si no gastásemos tanto en leche, tal vez podríamos ponerte guapa.- Siempre me lo decía. Como si la belleza me importase ya, como si el estar un poco más guapa o con la ropa más limpia me fuera a dar un hogar. Sacudí la cabeza. Hay cosas que acabas asumiendo con el tiempo. Bajé la vista al bolsillo, por el cual asomaba la cabeza de un gatito con un ojo de cada color. Apenas había abierto los ojos, era demasiado joven. Me maulló y comencé a notar que todo el bolso vibraba con el ronroneo de los gatitos. Sonreí. Ellos no sabían lo que era estar sola.
Yo sí.
- Prefiero salvarles la vida- Respondí.
Quítale lo de harapienta y el nombre y soy yo.
ResponderEliminarGenial, como siempre <3
Estuve pensando en hacer a Seline y adaptarlo a la historia de la iniciativa, pero había cosas que no me cuadraban, así que al final le puse otro nombre.
EliminarY tu no eres harapienta, eres una dragona que ahora es un gato (ojalá yo robara gatos también, para robarte <3)
¡Un besín!
Que adorable, tanto esfuerzo para salvar a unos gatitos.
ResponderEliminarMe ha robado el corazón ;D
Impecable, personaje bien llevado y una narrativa clara, me encanta, un besooo
Lena
Jajaja creo que sabe lo que es sentirse abandonada... En realidad iba a ser la introducción de otro personaje que pensaba traer pronto al blog, pero las edades no me cuadraban, así que decidí dejarlo para otro momento.
EliminarMe alegra que te gustara, Lena.
¡Un besín!
Qué bonica Kayle :-)
ResponderEliminarY que poco sentido cívico tiene la policía (no se de qué me sorprendo.. jejejeje)
Muy tierna (y una pizca triste) historia. :,,)
Besicos!
Ya, la verdad es que supongo que con esas pintas, en una residencia grande... pues acabaran llamando a la policía. Pero nunca tenía nada (y ahora gatos, ya ves tú, menudo robo)
EliminarSí, la historia tenía una pizca de tristeza, nada comparado con lo que escribieron en el blog de la iniciativa, pero con ese aspecto tenía que ser algo triste.
¡Un besín!
Sólo una cosa: ¡¡¡un gatito con heterocromía!!!!!!!!!!!! <3
ResponderEliminarMe ha gustado mucho esta historia, es sencilla y muy tierna.
¡Muchas gracias por escribir en nuestra iniciativa!
Bss!
Sí, tenía que ponerlo <3 Además me encantan jaja
EliminarMe alegra que te haya gustado, aunque sigo pensando que la tuya era mejor.
¡Un besazo enorme!
Gema, gracias por tan bonito relato. Pienso en Shirley y en los gatitos. Me entristecen, pero a la vez me hacen sentirme feliz. Un cariñoso saludo. GGG.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario Ginés, me alegra que te gustara la historia.
Eliminar¡Un besín!
Una vida complicada la de los personajes que has creado, pero con una cierta esperanza que me saca una sonrisa :) Muy buena historia, me ha gustado mucho <3
ResponderEliminarSaludos~