Una última voluntad. {Drabble}

¡Buenos días! ¡Al fin viernes! ¿Comenzasteis ya las clases? Yo sí. Ha sido algo tedioso, y la verdad es que en algunas clases mis amigos me abandonan y me siento muy solita, pero por lo menos tengo más ánimos que el año pasado, y eso ya es una ventaja muy grande.
Hoy tengo visita, así que si me veis es porque o bien estamos las dos de apalancada en el sofá, o bien porque me he despertado temprano y ella sigue durmiendo. De todos modos no iba a dejaros sin terminar la historia.
Que sí, que sé que parecía que estaba acabada. Pero yo no soy tan cruel (que no, en serio), así que en realidad es mejor de lo que parece :)
¡Espero que lo disfrutéis! Os recuerdo que las dos entradas anteriores están aquí la primera y aquí la segunda. ¡Espero que disfrutéis con esta tercera y última entrega (de momento)!

Una Última Voluntad.


-Lo siento- Susurró Gaer, aprovechando sus últimas palabras para disculparse. Todavía le pesaba la cabeza de Aruen sobre su hombro-No debería haberte hecho venir. Ni todo lo que te hice.
-Callate idiota- Espetó ella, con la voz cogida por las lágrimas. Sintió sus labios moverse en su cuello, y un escalofrío lo recorrió de principio a fin, no podía creer que sus terminaciones nerviosas estuvieran tan sensibles por aquel roce, teniendo el estómago abierto en horizontal.

-Solo quiero que sepas que entiendo que odies a mi padre, ye yo también lo haría, y que no te guardo rencor. Que sé que esta no fuiste tu.
-Gaer por favor, cállate.- Repitió, apartándose de él y recostándolo con cuidado en el suelo. Sus ojos seguían brillando por el llanto. Gaer extendió la mano para acariciar su mejilla, dejando el rastro de su sangre en ella.
-Y que me encantaban esos besos que para ti no eran nada. ¿Podrias darme uno mas?
-No.- El joven frunció el ceño. ¿Estaba sonriendo?
-¿Ni me vas a conceder una ultima voluntad?
-No es tu ultima voluntad, pesado.- Sonrió ella, gloriosa, mientras retiraba con grácil velocidad la daga. Gaer se miró con gesto preocupado el estómago, pero la herida había cerrado.-Ese idiota dejó de controlarme en el momento en el que te clavé la daga. No pensaba dejarte morir aquí.
-¿Y me dejas decirte todo eso sin inmutarte?
-No me hiciste caso cuando te dije que callaras.
-¡Crei que me iba a morir, Aruen!
Ella se giró, parecía que sus lágrimas habían acabado, y solo la humedad de sus mejillas recordaba el horrible momento que acababan de pasar. El dolor de su estómago parecía estar remitiendo, y pudo incorporarse.
- Pero yo sabía que estabas bien.- Sonrió, acariciando su mejilla.- Siento todo esto. Haberte atravesado con la daga y eso.
- Y la pierna.- Al recordarlo, Gaer se miró la herida. De lo que había sido un corte lacerante que no dejaba de sangrar solo quedaba el reguero de sangre corriendo por su pierna. Ni una cicatriz.- Vaya, no sabía que fueras tan buena.
- Me gusta guardarme mis secretos.- Suspiró, cogiendo la espada y guardándola en su cinto.- Será mejor que nos vayamos cuanto antes, no quiero estar aquí cuando el hombre vuelva y no te encuentre tendido en el suelo con un charco de sangre a tu alrededor.
La idea dio escalofríos a Gaer, que asintió y salió del cuarto tomando la mano de Aruen. No pensaba volver a dejarla sola.
No, cuando por fin la había recuperado.




Comentarios

  1. Dios ha sido precioso, casi me echo a llorar. Tienes un don para esto, siempre consigues ponerme la piel de gallina cuando leo tus relatos. Increíble de verdad.
    Un besazo <3

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    1. Jo, me alegra muchísimo que te hayas emocionado tanto con el relato, en serio :) Sobre todo cuando viene de alguien como tú, que sabes que adoro como escribes.
      En serio, muchas gracias por tu comentario, Ana Belén.
      ¡Un besín!

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  2. Vaya, desde luego es dificil encontrar un blog de relatos, pero creo que he encontrado uno que merece la pena seguir ;D
    Pobre, le hace sufrir... jeejeje
    Bueno, un beso de tu nueva seguidora
    Lena

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    1. ¡Muchas gracias Lena! Me alegra que te haya gustado. Sí, los blogs de relatos a veces escasean, pero siempre es bueno encontrar a gente con los mismos gustos.
      Yo soy de hacer sufrir pero luego les doy un final feliz, aunque sea tras muuuucho tiempo, jajaja
      Un besín, me alegra mucho que me sigas.

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  3. Aish, qué bonito todo *-* Me gusta las historias que acaban bien :)

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